Zinedine Zidane y los suyos se ejercitaron en territorio enemigo y empezaron a saborear lo que será medirse mañana al Legia en un escenario completamente vacío (o casi completamente).
El entrenador francés contó con 19 futbolistas, todos los convocados, para una sesión en la que el equipo trabajó con intensidad para llegar a tope a un choque ante el Legia en el que puede sellar su clasificación.
Con 15 minutos a puerta abierta para los medios de comunicación, durante ese periodo se pudo ver a un Real Madrid calentando sobre el césped y empezando a tocar balón. Y es que la pelota, una vez más, fue protagonista principal en el entrenamiento de este martes.
El Real Madrid se enfrentará en apenas 24 horas al Legia en el mismo escenario y con las mismas condiciones, ya que no habrá aficionados en las gradas. Zinedine Zidane confesó en rueda de prensa que será raro e incluso que habría preferido un ambiente hostil. Pero el Madrid es capaz de adaptarse a todo.
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