Las estadísticas que dejan en RIDÍCULO al análisis de la Caverna

La prensa culé coincide al asegurar que el Barcelona "perdonó" al Madrid


Las portadas de la prensa culé tras el Clásico

Las portadas de la prensa culé tras el Clásico




Cualquiera que no haya visto el partido y se disponga a leer las páginas de medios como 'Sport' o 'Mundo Deportivo' podría pensar que el Barcelona ayer le dio un baño al Real Madrid y dejó que los de Zidane se escaparan 'vivos' de su estadio. "Perdonan" o "El Barça perdona" titulan en sus portadas este domingo, haciendo creer a sus lectores que el conjunto azulgrana fue muy superior a su rival en el partido y mereció el triunfo del que les privó Sergio Ramos con su gol salvador en el minuto 90.

¿Y en qué se basan para hacer semejantes afirmaciones? Pues en las ts únicas y claras ocasiones que tuvo el equipo catalán durante el partido. En especial la de Neymar, quien en el minuto 67 realizó una magnífica acción personal al recortar a Carvajal en el área y perfilarse para rematar a portería con todo a favor. Sin embargo, el brasileño quiso ajustar tanto el balón que el mismo acabó perdiéndose por encima de larguero en un fallo impropio para un futbolista que ha costado más de 100 millones de euros.

De hecho, de haber entrado esta ocasión habría finiquitado el partido, ya que el resultado por entonces era de 1-0 y el Barcelona disfrutaba de sus mejores minutos en el choque. Aunque eso sí, no fue la última oportunidad interesante de los culés para sentenciar el Clásico, pues a diez minutos para el final Messi también tuvo la suya para poner el 2-0. Iniesta le dio un magnífico pase en profundidad, pero el argentino controló y se escoró unos metros, lo suficiente para rematar en una posición incómoda y acabar cruzando demasiado el esférico.

Con la acción del argentino se esfumaron las opciones reales del Barcelona de ganar, pues los últimos minutos del partido los pasó metido en su campo intentando aguantar las acometidas del Real Madrid. Los blancos achucharon a su rival buscando el empate y al final lo lograron con un cabezazo de Sergio Ramos en el último minuto. Fue un justo premio para la superioridad que los merengues demostraron durante al menos 70 de los 90 minutos del partido, aunque la culerada hoy se niegue a aceptar esta realidad.

En el descuento Sergi Roberto tuvo volver a deshacer la igualada con un cabezazo lejano tras una salida de Keylor Ramos, pero Casemiro acabó salvando el balón bajo los palos y el resultado no se movió. Por lo tanto, el bagaje culé en la parcela ofensiva se puede resumir en un gol en fuera de juego y en tres ocasiones claras y evidentes de marcar. En nada más, porque en lo que respecta a fútbol, entrega y dominio el Real Madrid fue el claro vencedor del partido.

Las estadísticas hablan de superioridad merengue

Y esto es algo que no lo decimos nosotros, sino que así lo reflejan las estadísticas del choque. En total, el Barcelona remató 6 veces, y únicamente 2 de ellas entre los palos. Mientras tanto, el Real Madrid chutó hasta en 11 ocasiones, 5 a portería. Datos a los que hay que sumar los 7 córners lanzados por el líder - por solo 5 del Barcelona - y el dominio blanco en los duelos (55,6 % ganados) y en las entradas (70,8 % ganadas por el Madrid por 66,7 % de los culés). Así, los de Luis Enrique realmente solo pueden presumir de haber tenido ligeramente mayor posesión, con un 55 % del total.

Y luego está el análisis del choque. Subjetivo, sí, pero realista. Cualquiera que viera el partido pudo darse cuenta de que el Real Madrid fue superior a los puntos en la primera mitad. El Barcelona no tuvo una sola ocasión, mientras que enfrente los blancos se imponían en el juego y generaban tímidas ocasiones en las botas de Cristiano. El luso tuvo dos remates en buena posición que logró atajar Ter Stegen sin demasiados problemas; mientras que en la portería rival Keylor Navas era un espectador de auténtico lujo.

Y en la segunda parte el partido cambió. El Barça mejoró y durante 20 minutos agobió al Real Madrid. De hecho, fruto de este dominio llegó el gol de Suárez - en posición ilegal -. También gozaron de las mencionadas ocasiones de Neymar y Messi. Pero nada más. Porque los blancos espabilaron en el tramo final del partido y poco a poco metieron atrás a su rival hasta lograr el empate. De hecho, segundos antes de que llegara el mismo Cristiano tuvo una ocasión clarísima en un remate de cabeza que Jordi Alba sacó bajo palos cuando ya se colaba en la portería.

Así que, en resumen, el resultado fue más que justo. El Barça tuvo las ocasiones más claras, mientras que el Real Madrid dominó territorialmente, remató más y transmitió mejores sensaciones. Por no mencionar la actuación de Clos Gómez... Así que en la 'Caverna' quizá harían mejor este domingo en dar gracias por no estar a 9 puntos de su rival, porque en condiciones normales incluso podrían estar lamentando ahora una nueva derrota en su casa y ante el eterno rival.