Lo ocurrido tras el Villarreal-Real Madrid tuvo por momentos tintes de guión de película de mafiosos. Y es que el trencilla extremeño Gil Manzano se vio obligado a escribir una anexo en su acta arbitral una vez que ya había completado la misma cuando él y sus compañeros se encontraron con dos papeles en sus coches en los que se les tildaba de 'LADRONES'.
"Una vez entregadas las actas del partido, fuimos acompañados por personal de seguridad al párking donde teníamos estacionados nuestros vehículos, el cual es una zona controlada y dentro del recinto del estadio, encontrando un papel en el parabrisas de dos de nuestros vehículos en los que ponía escrito a mano 'LADRONES'" comunicó en su anexo el colegiado.
Además, Gil Manzano añadió que "este hecho le fue comunicado al delegado de campo, desconociendo el autor de los mismos". Y es que lógicamente en el club castellonense todo el mundo se va a lavar las manos sobre lo ocurrido. Pero la realidad es que, como señala el acta, los coches de los colegiados estaban en una zona acotada y en el interior del Estadio de la Cerámica, por lo que solo unas pocas personas sabían que los mismos les pertenecían... Así que no hace falta ser muy listo para intinuir quién pudo estar detrás de este lamentable suceso.
Gil Manzano refleja que se encontraron en el coche un papel donde se leía "LADRONES" en una zona controlada en el parking de Villarreal pic.twitter.com/bHlhVPIt6X
— El Partidazo de COPE (@partidazocope) 27 de febrero de 2017
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