El Barcelona se ha encargado de tapar la boca a los que critican el escaso homenaje a Johan Cruyff
El homenaje a Johan Cruyff
En Barcelona han vuelto a demostrar la falta de transparencia y de democracia que caracteriza al Barça, pero es que el último ejemplo es de aúpa ya que se ha reflejado en el homenaje a Johan Cruyff, justo un año después de su muerte.
El
Barça ha decidido homenajear a
Cruyff poniendo su nombre al nuevo
Mini Estadi, un estadio que todavía es un proyecto y que ni siquiera está cerrado que se vaya a construir.
Pero es que, además, el
Barça ha decidido que el nombre de la calle
Arístides Maillol, sede postal del club, lleve el nombre de
Cruyff, cuando eso lo tiene que decidir en el pleno el
Ayuntamiento de Barcelona.
Es decir, que el
Barça ha homenajeado a
Cruyff con
un proyecto de estadio y nombrando una calle sin recibir el permiso necesario del
Ayuntamiento de Barcelona y sin ni siquiera haberlo consultado.
Pero lo peor de todo es que algunas voces se han pronunciado en algunos de medios de comunicación para quejarse del escaso homenaje del
Barça a
Cruyff y han sido acalladas.
Ya nadie puede criticar el homenaje del
Barça a
Cruyff en ningún medio de comunicación para no generar polémica por un acto penoso del club a una persona que les cambió por completo.
La excusa para acallar a los críticos es que la familia de
Cruyff no se ha quejado, algo que por otra parte es mentira, ya que
Jordi, el hijo de
Johan, reconoció en una entrevista que el homenaje era algo escaso.
DEJA TU COMENTARIO