El Real Madrid dio este lunes el primer paso para salir de su crisis

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Pese al duro varapalo que supuso perder el sábado la plantilla no salió con malas sensaciones del partido. La idea que rondaba la cabeza de la mayoría de los jugadores es que solo la mala suerte privó al equipo de la victoria, por lo que su primer pensamiento fue centrarse cuanto antes en el próximo partido para salir de una vez de este pozo en el que parecen encontrarse. Así, su vuelta hoy a los entrenamientos ha sido para ellos como una liberación, ya que les permite enfocar claramente el próximo objetivo y dejar atrás la última jornada liguera.

¿Y qué ha traído de nuevo el entrenamiento del lunes? Pues en la parte positiva Marcos Llorente se ha incorporado al grupo tras no haber podido entrenar el pasado viernes por unas molestias en el hombro. El madrileño está totalmente recuperado y podrá jugar el jueves en Butarque (21:30 horas, GOL) si Zidane lo estima conveniente. Aunque no todo han sido buenas noticias como esta, porque por su lado Sergio Ramos y Benzema siguen siendo baja para el choque ante los pepineros.

El capitán trabajó sobre el césped de Valdebebas con y sin balón, pero aún no está integrado en el grupo. Y el francés sí llevó a cabo con la plantilla la parte física del entrenamiento, aunque posteriormente pasó a hacer ejercicios en solitario. Lo cual lleva a pensar que su vuelta al equipo está más próxima que la de Ramos, así como que la misma podría producirse este domingo ante el Deportivo o y a la semana próxima en el partido de vuelta ante el Leganés.

Por lo demás, en el aspecto puramente futbolístico el entrenamiento se inició con un circuito en el que el balón fue el centro de la atención de los jugadores. Y más tarde Zidane dispuso que sus hombres practicaran aspectos tan importantes como la circulación, la presión, los centros y los remates; para acabar organizando una serie de partidillos en campos de reducidas dimensiones.