El Tottenham ya ha respondido a la megaoferta blanca de 227 millones por Kane

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Florentino Pérez conoce muy bien al presidente de los 'Spurs', Daniel Levy. Se podría decir que demasiado bien, porque ya sufrió su 'rocosidad' cuando en 2012 y 2013 negoció los fichajes de Luka Modric y Gareth Bale. En ambos casos el Real Madrid tuvo que 'sudar sangre' para convencer al Tottenham de que dejase marchar a sus estrellas. Y ahora, un lustro después, la situación no va a cambiar para que Kane siga el mismo camino que el croata y el galés.

De hecho, el domingo el diario 'The Times' aseguraba que el equipo español está dispuesto a ofrecer cerca de 227 millones de euros para fichar el próximo mes de julio al delantero de moda del fútbol mundial. Una propuesta que teóricamente aceptaría cualquier club por ser la mayor jamás planteada en el deporte. De hecho, superaría por poco los 222 millones de euros que el PSG pagó al Barcelona el pasado verano para fichar a Neymar Jr... Pero ni por esas, porque al Tottenham no le motiva hacer historia de esta forma.

De hecho, este lunes es el rotativo inglés 'Mirror' el que da en su portada un portazo al traspaso de Harry Kane al Real Madrid. "¿200 millones de libras? Harry no tiene precio" titula este medio, aludiendo a unas declaraciones del técnico del Tottenham, Pochettino, sobre esta supuesta oferta de los madridistas. "¿Otra vez me preguntáis sobre este asunto. No voy a hablar sobre rumores porque si doy una explicación sobre un rumor, entonces tengo que hablar de todo en mi rueda de prensa y dar mi opinión. No voy a hablar de rumores sobre Kane o sobre mí. No es mi problema explicar estas habladurías" comentó el argentino con cierto malestar.

Por lo tanto, en Inglaterra han interpretado este 'regate' del entrenador como una negativa velada del club ha escuchar ofertas por su futbolista franquicia. El Tottenham quiere terminar de dar el salto a la élite del fútbol europeo y sabe que la única forma de conseguirlo pronto es reteniendo a sus estrellas, en especial a Kane y Dele Alli. En consecuencia, su postura inicial es la de cerrarse en banda y no contestar a la llamada del Real Madrid, por mucho que el equipo español esté dispuesto a hacer una 'locura' por el '9'. Aunque quizá la clave de la operación esté en insistir una y otra vez en las próximas semanas...