Estamos en año de Mundial, y como tal nos encontramos con un calendario muy comprimido en el que casi no hay fechas para jugar los partidos. Por eso en esta temporada la final de la Copa del Rey está prevista para finales del mes de abril y no para los últimos días de mayo, tal y como suele ser habitual.
La idea es que el partido decisivo por el trofeo del K.O. se juegue el próximo sábado 21 de abril. Así que obligatoriamente los dos finalistas no podrán disputar su jornada de Liga prevista para ese fin de semana. Y en este caso el azar ha sido tan caprichoso que el
Real Madrid ya se va a ver afectado sí o sí por esta circunstancia. ¿Por qué? Porque precisamente en la jornada 34º le toca jugar contra el primer finalista, el
Sevilla. Los andaluces ganaron anoche por 2-0 al
Leganés y lograron su billete para este encuentro decisivo.
Así que en
Concha Espina han amanecido con la noticia de que tendrán que disputar esa jornada 34º entre las 36º y 37º. O lo que es lo mismo: el
Sevilla-Real Madrid del
Sánchez Pizjuán será movido con casi total seguridad al miércoles 9 de mayo. Lo cual supondrá el segundo aplazamiento de la temporada para los merengues después de que el
Leganés-Real Madrid que debería haberse disputado el pasado mes de diciembre no pudiera hacerlo y pasara
al próximo 21 de febrero, fecha en la que los dos equipos estarán totalmente disponibles.
Además, cabe recordar que la pasada temporada el
Real Madrid ya vivió otro doble aplazamiento en sus partidos ante el
Valencia y
Celta de Vigo. Aunque eso sí, en el caso del partido de Balaídos hubo muchos más problemas por la participación de los gallegos en la
Europa League. Algo que en esta ocasión no sucederá porque aunque merengues y sevillistas avanzaran en Europa la semana del 9 de mayo está totalmente liberada de partidos de la
Champions League.
Y el
Real Madrid no va a ser el único afectado por esta circunstancia, porque como es lógico el otro finalista (
Barcelona o
Valencia) también tendrá que mover su partido de esa jornada a la mencionada fecha del 9 de mayo. Así, el
Barça-Villarreal o el
Celta-Valencia serán desplazados de su fecha natural en función del resultado que esta noche se dé en
Mestalla... así como quizá el
Atlético-Betis. Y es que los atléticos ya han ofrecido el
Wanda Metropolitano para la disputa de la final, así que si este resulta ser el elegido por la
Federación y los clubes los colchoneros también se verán obligados a retrasar casi tres semanas su partido de
Liga.
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