Según apunta El Confidencial, la entidad blanca sentiría esa contratación como un golpe bajo, duro e inesperado. Una traición. El Real Madrid está en deuda con Zidane. Florentino le debe todo. El francés ha cambiado, junto a Ancelotti, el rumbo de la historia del club en el siglo XXI.
Es por ello que lo dejaron salir. Entienden su desgaste y su explicación sobre por qué dejaba el cargo: “El equipo ya no cree en mí, necesita un discurso nuevo para seguir ganando”. Palabras honestas y sinceras que se están empezando a replantear en el club tras los recientes rumores.
En el club entienden que, para ocupar unas oficinas, las del Madrid ya estaban bien. Florentino tiene un cariño especial por Zidane. Fue su jugador, asesor y entrenador. Le ofreció el puesto que quisiese dentro del club si no quería dirigir desde el banquillo. Por lo tanto, no entendería que firmase para ser director deportivo de los turineses.
En definitiva, el Real Madrid se sentiría muy, pero que muy traicionado. Los dos mayores estandartes del éxito deportivo del club estas últimas deportivas trabajando para los bianconeri. Una pesadilla hecha realidad.
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