El club blanco tiene que reengancharse a LaLiga ya, después de la debacle ante el Eibar no se puede permitir un desliz más. Menos aún en su feudo, donde ya ha dejado escapar cinco puntos -un empate, en el derbi y una derrota ante el Levante-. La afición debe ser el jugador número ‘12’, superando ya la mala imagen que ofrecieron sus pupilos ante el Valladolid, en un momento clave de la temporada.
El Valencia, este sábado, será el primer rival y, ‘a priori’, el más difícil de los cuatro. Los che, que no ganan en el Bernabéu desde 2008, llegan después de decir adiós a la Champions y con el objetivo de igualar a los blancos en la clasificación con 20 puntos. Cinco días más tarde, los blancos recibirán al Melilla en la vuelta de los dieciseisavos de Copa, que después del 0-4 de la ida, el partido debe convertirse en un trámite, que disputen los menos habituales y algún canterano.
El domingo 9 de diciembre, que podría disputarse el River-Boca en la ‘casa’ blanca, el Real Madrid viajará a Huesca antes de recibir al CSKA en Champions en otro trámite, porque los blancos ya tienen garantizada la primera plaza de grupo después de su victoria en el Olímpico. Finalmente, el Rayo, en puestos de descenso, será el último rival de los de Solari en el Bernabéu en el 2018 el sábado 15. El Mundialito de Clubes de los Emiratos Árabes Unidos, que cerrará el año de la ‘Decimotercera’, será el gran objetivo de los de Chamartín.
Así será la calma tensa del ‘coliseo’ madridista antes de la tormenta. En el mes de enero, los blancos, inmersos en las eliminatorias de la Copa del Rey, visitarán al Villarreal y al Betis -entre medias recibirán a la Real Sociedad- antes de recibir al Sevilla, el líder de LaLiga. Y en febrero llegan los octavos de la Champions…
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