Tarde de tristeza, otra más para el conjunto blanco que parece ya estar acostumbrado a perder siempre que sale fuera del Bernabéu. Hoy Zinedine Zidane había decidido dar descanso a Varane y descartar a los ya sentenciados por su parte, Bale y Ceballos. (El equipo que quiere a Ceballos)
Hoy todos los focos apuntaban sobre todo a una nueva titularidad de Isco, quien se volvió a arrastrar por el campo sin pena ni gloria, y ya sin ni si quiera ser capaz de dejar un solo detalle. También recaía el peso sobre Asensio, quien una vez más no apareció, ni marcando, ni asistiendo, ni ayudando al equipo a hacer un mejor fútbol. Ni el propio Benzema, que volvía de lesión ha ayudado con algún gol, al que ya prácticamente nos había acostumbrado.
Un día más en el que los 15 minutos que ha disputado el brasileño, han sido de lo mejor teniendo en cuenta que el nivel tampoco es muy alto. El joven jugador ex del Flamengo ha vuelto a desequilibrar a la defensa contraria siendo capaz de crear el peligro, que excepto Brahim en el gol, el equipo no había sido capaz de crear.
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