Con su entrada al partido por James el Madrid cambio el esquema a un 4-3-3 en el que Vinicius y Bale permutaron sus posiciones constantemente, lo que provocó apariciones del brasileño en uno y otro costado. (Varane detectó un grave problema del Madrid para no ganar)
En su primera jugada provocó una peligrosa falta al borde del área en una internada por el costado izquierdo, mientras que en la segunda le vimos por la banda derecha encarando a los defensores pucelanos.
Con su entrada se le imprimió un ritmo más al partido, ya que todo balón que pasaba por sus botas era sinónimo de peligro gracias al desparpajo que siempre muestra. Si hubiera que ponerle un pero a su actuación sería el hecho de que las jugadas que iniciaba no terminaban de concretarse en un peligro real para la meta final.
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