El conjunto rojiblanco recibió al colista de LaLiga y, en un final de locura, pudo ganar el partido, pero también perderlo. El portero visitante, el Pichu Cuéllar, fue expulsado por doble amarilla ya en el tiempo de descuento, pero el árbitro Antonio Mateu Lahoz no se ‘atrevió’ a sacar una amarilla muy clara a Felipe. (El Cholo ya no convence a nadie: otro 'pinchazo' del Atlético en Liga)
El central brasileño, que se presentó al duelo ante el Leganés apercibido de sanción con cuatro cartulinas amarillas, pudo ver la quinta y perderse el derbi del próximo sábado ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu después de un empujón que rozó la etiqueta de agresión a Recio, centrocampista del club ‘pepinero’.
Felipe simuló un penalti y el ex del Málaga se lo fue a reclamar. El defensa carioca reaccionó con un empujón y el colegiado valenciano le perdonó la cartulina amarilla por el ‘piscinazo’ y por el empujón. Un sinsentido. Así, al término del partido, Felipe apuntó que no pensó “nunca” que “llevaba cuatro amarillas”. “No piensas nunca en el siguiente partido sino en el que estás jugando. Ahora es cuando pienso en el siguiente partido y me alegra poder jugarlo”, explicó. Felipe y Llorente, que también estaba apercibido, podrán estar en el derbi.
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