Dicen los psicólogos que el estrés es fruto de una situación de tensión crónica que conlleva una disminución del rendimiento laboral y la calidad de vida.
Para combatirlo con una sonrisa, hay que respirar hondo, buscar tranquilidad y serenarse con paciencia. Si eres deportista, joven y defiendes cada semana los colores del Real Madrid Castilla, siempre hay una alternativa: el ‘Paint-ball’.
La plantilla del filial blanco organizó una singular mañana de prácticas en grupo pero no con el balón de por medio ni en entrenamientos, sino rodeado de pistolas, trajes de soldado y muchas risas. Julen Lopetegui reunió a su grupo en torno a una partida del desestresante juego, que sirvió para unir a la plantilla justo cuando se alcanza la segunda parte de la campaña y se desvelarán los objetivos de final de campaña.
El Castilla en masa, incluyendo a algunos jugadores del Real Madrid C, se reunieron en el Restaurante Imanol donde se dieron un festín de comida vasca. Tras ella, al técnico se le ocurrió la idea de llevar más allá la jornada de grupo y se llevó a sus chicos a jugar al Paint-Ball para divertirse y, de paso, generar situaciones que puedan explotar otras características que el fútbol también agradece. Velocidad, reflejos, rapidez de movimientos…
En fin, una jornada donde el grupo fue el protagonista y que a buen seguro servirá para unir a una plantilla que busca mantenerse en puestos de play-off de ascenso a Segunda División.
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