El Madrid gana pero no brilla

Roberto y Pérez Burrull facilitaron las cosas a los de Juande. El árbitro dejó de pitar dos penaltis a favor de Osasuna. Juande apeló a la épica en el descanso y el equipo se impuso 3-1





Que los árbitros favorecen al Real Madrid forma parte de la leyenda negra de este club, pero no es menos cierto que a lo largo de los años ha habido episodios en los que la actuación arbitral ha sido determinante para decantar la victoria del lado madridista. Recuerdo a un desvergonzado árbitro holandés llamado Leonardus Van der Kroft que anuló en la Copa de Europa de 1976 dos goles legalísimos al Borussia Moenchengladbach y recuerdo, asimismo, un canallesco arbitraje que sufrió el Atlético de Madrid en una semifinal de Copa del Rey, con Guruceta de protagonista. Lo de Pérez Burrull ha sido un atraco de proporciones similares a lo Van der Kroff o a lo de Guruceta. El nefasto árbitro cántabro, que sigue haciendo honor a su segundo apellido, se tragó un penalti de Gago a Juanfrán en el minuto 15 y se tragó otro penalti de Pepe al mismo Juanfrán en el 83 (primero lo pitó y luego se desdijo). Y, lo que es peor, en ambas ocasiones mostró cartulina amarilla Juanfrán, por entender que había simulado la caída.

Motivos de queja tiene Osasuna, que a pesar del error arbitral en el primer penalti supo reponerse y adelantarse en el marcador, gracias a un cabezazo de Nekounam a pase de Plasil. El Real Madrid había empezado bien, con una muy clara ocasión de Higuaín en el primer minuto. Pero eso, y un gol bien anulado a Sergio Ramos por fuera de juego (cabezado en una falta botada por Sneijder), fue todo lo que hicieron los de Juande en el primer periodo, dominado de cabo a rabo por los visitantes, ante la desesperación de un público que se estaba temiendo lo peor.

Cambio de panorama

Tras el descanso, Juande mandó al caraj0 su orden y apeló a la épica. Quitó a Cannavaro, metió a Huntelaar y situó de lateral derecho a Lass. También dejó en la caseta a Sneijder, que sigue igual de desafortunado que en los últimos partidos, y dio entrada a un Van der Vaart más participativo que otras veces. Ya fuera por los cambios, ya fuera por las ganas que le echaron los blancos o ya fuera porque Osasuna empezó a tirarse hacia atrás, pronto llegó el empate. Fue en el minuto 50. Sergio Ramos cogió el balón, encaró hacia puerta y soltó un fuerte zurriagazo desde una treintena de metros. La pelota botó delante de las narices de Roberto, que llegó a tocar, pero no pudo impedir el gol.


Un cuarto de hora después, llegaría el segundo tanto madridista. Fue una acción entre Higuaín y Robben, que acabó rematando el argentino a placer. Vino después el penalti no pitado de Pepe, la expulsión de Juanfrán, la desesperación de Osasuna y hasta tres magníficas ocasiones locales (Robben, Marcelo y Van der Vaart) para ampliar el marcador. Pero el tercer gol se hizo esperar: en el minuto 93, Robben completó una acción personal con un zurdazo rasó que se tragó, como en el primer gol, Roberto.Ya me pareció la pasada semana, frente al Barcelona, que Roberto es el peor portero del fútbol español. Lo he podido corroborar ahora. A Camacho le iría mejor si colocara a otro que no fuera Roberto bajo palos. Y desde luego, no podemos negar la evidencia, también le iría mejor si no le volviera a pitar Pérez Burrull.

Ficha técnica:

Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Cannavaro (Huntelaar, 46'), Heinze; Robben, Lass, Gago, Sneijder (Van der Vaart, 46'); Higuaín (Marcelo, 79') y Raúl.

Osasuna: Roberto; Azpilicueta, Josetxo, Miguel Flaño, Monreal (Javier Flaño, 45'); Juanfrán, Puñal, Nekounam, Plasil (Portillo, 67'); Masoud y Pandiani.

Goles: 0-1 Nekounam (20'). 1-1 Sergio Ramos (50'). 2-1 Higuaín (64'). 3-1 Robben (93').

Árbitro: Pérez Burrul. Expulsó por doble amonestación a Juanfran (83'). Mostró tarjeta amarilla a Masoud (48' ), Higuaín (56'), Sergio Ramos (57'), Heinze (62'), Puñal (68') y Javier Flaño (70').

Incidencias: Estadio Santiago Bernabéu. Lleno, pero sin apreturas. Debutó como presidente en el palco Vicente Boluda.