Robben, merengue vestido de naranja

El holandés pidió el cambio en el partido de su selección para no forzar y estar en el choque contra el Málaga





Robben no quiso forzar la máquina, más aún cuando su país vencía ya en ese momento por 3-0, por lo que decidió pedir el cambio a su seleccionador, el señor Van Marjwik, en un gesto que deja bien a las claras el compromiso del jugador tulipán con el Real Madrid.

El holandés valoró, en última instancia, el estado de su selección, con la que fue un tanto crítico: “Todavía tenemos que mejorar muchas cosas. En la primera parte cometimos errores que no debíamos haber cometido. Espero que los resultados nos ayuden a hacer las cosas bien”, finalizó.