El ya internacional absoluto con la selección checa (marcó en su estreno el pasado mes de noviembre) responde al perfil del goleador del futuro porque más allá de su inestimable relación de amor con el gol, aglutina cualidades destacadísimas para un ariete. Es un rematador puro, de gran envergadura, cabeceador letal y veloz para la contra. Una perla escondida que el CSKA de Moscú supo atar y que ahora, no sin problemas, está a un paso de dar el salto definitivo al fútbol de primer nivel.
Necid, que ya en el Europeo Sub 17 de 2006 fue máximo goleador y estrella total del torneo, repitió éxito dos años después como Sub 19, cuando clonó sus grandes actuaciones con goles que le llevaron a firmar como máximo artillero, marcando cuatro tantos en otros tantos encuentros. Por entonces, Tomas despuntaba en la Gambrinus League checa, donde surgió de las categorías inferiores del Slavia de Praga, que lo cedió en su primer año como profesional al Jablonec, donde se convirtió en el ‘killer’ del equipo. Regresó a Praga y tras lograr seis goles en las primeras cinco jornadas, el CSKA apareció en escena y se lo llevó al frío moscovita cuando ya llevaba nueve tantos en global.
En la recientemente comenzada Premier Rusa, Necid ya ha dado la Supercopa a su nuevo club. Los de Zico alzaron el primer título de la campaña tras un tanto del checo en la prórroga ante el Rubin Kazan tras una arrancada plena de velocidad, descaro y remate.
Ahora, ese ‘killer’ de pegada letal y futuro intachable, puede vestirse de blanco pues el Real Madrid ya ha contactado con su entorno y le ha trasladado el interés en contar con él en su nuevo proyecto deportivo. Las elecciones de este verano aparecen como único obstáculo a la hora de iniciar las gestiones.
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