Casillas, un 'para-penalties' de élite

Tras detener el de Casquero





Sin embargo, no es el primer penalti que el portero merengue detiene. De hecho éste es el último de una larga lista que ha convertido al propio Casillas en la pesadilla de muchos lanzadores de penas máximas, aunque un anuncio de cervezas intente convencernos de lo contrario. Este año ya ha parado otros dos además de el del martes en el Santiago Bernabéu, uno al Betis en el Ruiz de Lopera y otro a Etoo en el Camp Nou, pero la leyenda ya existía de antes.

El Mundial de Nigeria Sub-20 fue su bautismo

Uno de los primeros penalties detenidos por Iker en su época ya madura, y que él mismo siempre recuerda con nostalgia, fue en el Mundial Sub-20 disputado en Nigeria hace justo diez años. En aquel entonces, el portero merengue formaba parte de un combinado integrado por jugadores como Colsa, Orbaiz, Marchena, Pablo Couñago, Xavi o Gabri, que se alzó con el título final tras ganar a Japón 4-0 en una final a la que no se podría haber llegado si Casillas no hubiera detenido el último lanzamiento de la tanda de penalties de cuartos de final ante Nigeria, y que le hizo famoso en todo el país.

Ya asentado en el primer equipo del Real Madrid, Casillas volvió a ser protagonista en una tanda de penalties de un Mundial, pero esta vez fue con la selección absoluta, y en Corea. El madrileño detuvo los lanzamientos de los irlandeses Connolly y Kilbane, que permitieron a España pasar a los cuartos de final del campeonato mundial. Desafortunadamente, ese año no se pudo ganar el entorchado, pero el meta pudo quitarse esa espina este verano en la Eurocopa celebrada en Austria.


La Eurocopa de Austria, su consagración

Entonces, la Roja se jugaba con Italia el pase a las semifinales en una tanda de penalties en la que el duelo Casillas-Buffon acaparaba todas las miradas. El meta merengue se erigió en el protagonista indiscutible de la eliminatoria al detenerle a Rossi y Di Natale sendos lanzamientos, consolidándose así como un ‘para-penalties’ nato. Tanto en Viena como en Nigeria, la selección acabó en lo más alto del podio tras las exhibiciones de Casillas, y quién sabe si la parada a Casquero no es el preludio de una próxima visita a la diosa Cibeles.