Se cumplen 15 años del fallecimiento de Luis de Carlos

Uno de los mejores presidentes merengues





Luis de Carlos Ortiz nació el 16 de marzo de 1907, socio del Real Madrid desde 1942, directivo desde 1957, y un presidente único en el Real Madrid: el hombre que tuvo la difícil misión de suceder a Santiago Bernabéu. Fue presidente del club blanco desde septiembre de 1978 hasta mayo de 1985, cuando se retiró a la vez que el equipo conquistaba su primera Copa de la UEFA, dejando el club en manos de Ramón Mendoza. Además fue el primer presidente que tuvo que acceder al cargo, en su segundo mandato, por medio de unas elecciones, que también fueron las primeras que se celebraron en este Club.

Luis de Carlos tuvo la difícil papeleta de dirigir el club en un período de transición tras la desaparición de su dirigente más legendario, pero a la postre dejó una huella en el madridismo. Con De Carlos al frente, el Real Madrid ganó dos Ligas, dos Copas del Rey, una Copa de la UEFA, un subcampeonato de la Copa de Europa, un subcampeonato de la Recopa y el título de Mejor Equipo de Europa en 1980. En su presidencia se remodeló el Estadio Santiago Bernabéu con vistas a la Copa Mundial de Fútbol de 1982, y se dio otro hito histórico como la disputa de la final de Copa más madridista de la historia, ya que se midieron el Real Madrid y el Castilla. Y también asistió a uno de los peores momentos del madridismo cuando en la 80-81 se perdieron la Liga y la Copa de Europa ante la Real y el Liverpool.

Sin embargo, lejos de dejar una impronta por los títulos deportivos, si por algo se caracterizó Luis De Carlos al frente del Real Madrid fue por su calidad de presidente. Su educación, su caballerosidad, su generosidad y su atención hacia todos fueron ejemplares. Fue realmente inigualable. Nadie podrá decir que Luis de Carlos tuvo un mal gesto con él o que se mostró antipático, enfadado o altivo. Todo un ejemplo para aquél que, 15 años después de que nos dejara, vaya a sentarse en el sillón presidencial en las próximas fechas.