Si bien en la entrevista Beckenbauer se queja del rifirrafe en torno al internacional francés y asegura que el debate entorpece el trabajo del entrenador "que quiere preparar a su equipo tranquilamente", sus declaraciones no hacen más que alimentar esta controversia.
Los presuntos coqueteos de Ribéry con el Real Madrid han dividido al Bayern de Múnich entre críticos al futbolista, como Beckenbauer, y sus defensores, como el técnico Louis Van Gaal, o el presidente, Karl-Heinz Rummenigge. Tanto van Gaal como Rummenigge insisten en que el propio jugador se comporta con toda corrección y de forma completamente profesional.
Rummenigge culpa al Real Madrid de la situación y en una reciente entrevista amenazó al club con demandarlo ante la Fifa si insistía en fichar al internacional francés: "El Real Madrid lleva semanas violando los estatutos de la Fifa, pues nosotros nunca dimos nuestro consentimiento para que hablaran con Franck o con sus agentes", aseguró Rummenigge en una reciente entrevista con el dominical "Bild am Sonntag".
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