Rummenigge continúa obsesionado con el Madrid

Afirma que el Madrid está condenado a ganar la Champions





Parece que de poco ha servido que el Real Madrid le vendiese este verano al Bayern a Robben por un buen precio (25 millones de euros), ya que desde Múnich continúan llegando críticas afiladas contra la gestión de Florentino Pérez. 

El último ha sido Karl-Heinz Rummenigge, quien en un ejercicio de hipocresía ha declarado en las vísperas del estreno de la Champions que "los hinchas y el público le pedirán al Madrid que gane la Champions debido a lo que se ha gastado. Está condenado a hacerlo después de que el Barcelona ganara todos los trofeos la campaña pasada. Además, la final es en su propio estadio".

Además, el antiguo punta alemán ha rematado sus afirmaciones restándole tensión a su propio equipo, ya que en sus palabras "este año, llevarse el trofeo continental se ha puesto más difícil que nunca". Con ellas, el presidente muniqués pretende quitarle presión a su propio equipo para colocársela al Madrid, un club al que tiene que agradecer que le vendiese a Robben en una operación que ha supuesto el revulsivo de su equipo en su liga doméstica.

 


Robben dependencia

Con el holandés los alemanes han jugado dos partidos y han conseguido victorias en ambos, lo que les ha permitido auparse al quinto puesto de la tabla tras un inicio de temporada en la que no ganaron ninguno de los tres primeros encuentros sin el extremo orange

Pero lejos de mostrar gratitud, Rummenigge ha vuelto ha abrir la caja de Pandora en relación al Real Madrid. Hace dos meses el presidente del Bayern acusó al Madrid de actuar al margen de la legalidad en relación al intento de fichaje de Ribery, una operación que finalmente no se cerró. Y ahora, sin motivo aparente, ha vuelto a acordarse de los blancos en su beneficio propio.

No se puede olvidar que el Bayern no ha tenido un inicio bueno de temporada a pesar de haberse gastado más de setenta millones de euros en fichajes por jugadores como Robben (25 millones), Mario Gómez (30), Tymoshchuk (11) o Pranjic (7,7). Por eso la estrategia teutona se basa en desviar la atención hacia otros clubes, de manera que sus propios problemas pasen desapercibidos. Y como se sigue demostrando, el Real Madrid sigue siendo su tema de distracción favorito.