Higuaín, titular; Raúl o Benzema, la duda

Pellegrini se deja de rotaciones y utilizará su mejor once posible a la espera de Ronaldo. El pipa vuelve tras su aventura con su selección. Kaká focalizará todas las miradas del Bernabéu





Y es que los últimos resultados cosechados por el equipo invitan a sacar el choque ante el Getafe adelante por lo civil o por lo criminal. Para ello, el chileno utilizará su defensa de gala, su mejor centro del campo (a falta de Ronaldo) y su mayor duda radica en el acompañante de Higuaín en la delantera.

El argentino, al que Pellegrini no ha terminado de dar toda la confianza que éste le ha demandado, será el clavo ardiendo al que se agarre el chileno para evitar la protesta de una afición ansiosa de triunfos. Hasta última hora no se conocerá si será Raúl o Benzema su acompañante en ataque. El capitán siempre tiene un plus extra cuando el Madrid juega en casa, aunque su desgaste físico (ha sido titular en los cuatro últimos partidos de Liga, además del choque de Champions con el Milán y el copero ante el Alcorcón) aconsejaría un descanso para el ‘7’ blanco. Benzema, por su parte, no termina de encontrar su sitio en la delantera y su compatibilidad con Higuaín parece más compleja por la similitud de movimientos que atesora ambos. Pellegrini y su almohada decidirán.

El retorno de Lass en el centro del campo se antoja vital para Pellegrini. Mahamadou no estuvo fino en Alcorcón y Gago no tiene aún el ritmo de competición necesario. El francés, que se perdió los dos últimos partidos oficiales del club (en Gijón y Alcorcón) servirá de parapeto de cara a un posible enfado del Bernabéu que tiene en el galo a uno de sus protegidos. Una de las papeletas más comprometidas será para Kaká. A falta de Cristiano, los 160.000 ojos de Chamartín se posaran sobre el dorsal ‘8’ del Madrid. Al brasileño le toca responder.

En la faceta defensiva, Pellegrini volverá a recuperar la defensa que más garantías le ha ofrecido. Ramos, Marcelo, Pepe y Albiol, además de Casillas, tendrán la obligación de parar la sangría de goles que ha descosido la solidez defensiva que el Madrid presentó en sus inicios de temporada.