El futbolista merengue ha sido sancionado, según reza la nota, "por infracción de las reglas de juego determinante de expulsión". Esto es, que el no control de un balón de espalas a portería sin ningún tipo de ventaja es cartulina roja para los miembros de un Comité en estado caduco.
El Villarato vuelve a demostrar, una vez más, que no tiene ningún tipo de rubor a la hora de hacer el ridículo siempre que tenga que castigar al Real Madrid, a pesar de que la televisión les deje en evidencia. Ellos siguen a lo suyo. Mientras a su jefe le haga gracia, ellos seguirán con sus chistes. De vergüenza.
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