Ambos equipos llegan en buen momento a la cita, después de que los comienzos tanto de uno como otro entrenador fueran más bien difíciles, aunque la llegada de buenos resultados ha transformado las críticas en elogios. Ejemplo de ello es Dunga, que aterrizó en 2006 en la "canarinha" tras el declive mostrado por Brasil en el Mundial de Alemania. El técnico brasileño, apuesta por un once donde la fantasía queda relegada a un segundo lugar, y en el que Kaká y Robinho son sus máximos -y casi únicos- exponentes. Brasil se ha clasificado como primera en el grupo sudamericano de clasificación para el Mundial con 34 puntos gracias a sus nueve victorias, siete empates y dos derrotas.
Enfrente tendrá a todo un experto en dotar de competitividad a sus equipos, el italiano Fabio Capello, que ha impresionado al mando del conjunto inglés al conseguir 27 puntos de 30 posibles. Capello cogió los mandos de una Inglaterra muy debilitada a finales de 2007, después de quedarse fuera de la Eurocopa 2008, y aunque sus inicios fueron titubeantes pronto se vieron los efectos de su trabajo.
El amistoso tendrá lugar en terreno neutral, concretamente en Doha (Qatar), aunque la ausencia de la mayoría de las estrellas inglesas por lesión obligará al preparador italiano a aprovechar el partido para hacer pruebas que le ayuden a decidir qué 23 jugadores lo acompañarán al Mundial de 2010. Steven Gerrard y David Beckham ni siquiera pudieron viajar con el equipo, mientras que Frank Lampard se lesionó ayer mismo en un entrenamiento realizado ya en Doha y John Terry también es duda. También faltan Ashley Cole, Rio Ferdinand, y Aaron Lennon entre los habituales del once de Capello.
Todo lo contrario ocurre en Brasil, donde Dunga podrá contar con casi todos sus jugadores para un partido vital para la preparación de cara al Mundial, debido a que la "canarinha" sólo disputará dos partidos más antes de llegar a la cita de Sudáfrica. El duelo también tiene sus dosis de polémica, ya que el mediapunta brasileño Robinho podría jugar frente a los ingleses pese a que no juega un partido oficial desde el pasado 5 de septiembre, cuando cayó lesionado precisamente con su selección. El entrenador del Manchester City, Mark Hughes, explicó ayer que se permitió a Robinho acudir a la concentración de Brasil con la condición de que no participara en el partido, un extremo que ha negado un portavoz de la selección brasileña.
Dunga tuvo que convocar hoy a última hora al zaguero Cris, del Olympique de Lyon, para intentar improvisar una defensa debido a las numerosas lesiones y ausencias en el equipo. Cris, de 32 anos, deberá concentrarse con la selección en la noche de este viernes en Doha y prácticamente será el único sustituto en la defensa en el partido de mañana. El entrenador brasileño tampoco podrá contar mañana con el lateral izquierdo Fabio Aurelio (Liverpool) ni con el centrocampista Ramires (Benfica), igualmente lesionados, y también está en duda la presencia de Felipe Melo, que ayer se quejó de una lesión.
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