"Estoy en las manos de Dios"

Pepe no quiere presiones y no piensa en si estará recuperado para poder jugar el Mundial





Pepe confesó al diario deportivo portugués 'A Bola' que le entristece no poder ayudar a su equipo, así como la posibilidad de no recuperarse a tiempo para participar en el campeonato del mundo que se celebra a partir del 11 de junio en Sudáfrica.

Sin embargo, el jugador aclaró que no quiere "vivir presionado", ya que ahora sólo piensa en "trabajar después de la operación para lograr una recuperación completa".

"Estoy en las manos de Dios y de los médicos", dijo Pepe, de 26 años, quien se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha durante el partido del pasado sábado entre el Real Madrid y el Valencia (3-2).