En los últimos días se anunció a bombo y platillo que el conjunto madridista podría tener en cartera para el próximo mercado de invierno al polivalente defensa del Chelsea, Ivanovic. Cuando Abramovic se enteró, torció el gesto, y se puso rápidamente manos a la obra con el objetivo de prolongar el contrato de este jugador de 25 años que finaliza su compromiso con los blues en 2011, según informa The London Evening Standard.
Ivanovic llegó, precisamente, de la mano de Abramovic, procedente del Lokotoviv de Moscú, previo pago de 10 millones de euros. Con la llegada de Ancelotti perdió cierto grado de protagonismo, sin embargo, tras la lesión del lateral derecho portugués Bosingwa, volvió a sentirse importante. De ahí que los londinenses se hayan cerrado en banda a la hora de dar salida a su jugador. Abramovic ya se lo ha tomado como una cuestión personal.
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