Las cifras del futbolista se situán en cinco goles en 16 partidos de Liga disputados más otro tanto en en los cuatro encuentros jugados en la Champions League. Y de los anotados en Liga (uno ante el Xerez, dos ante el Tenerife, uno ante el Almería y otro ante el Zaragoza) todos han ocurrido ante el amparo del Santiago Bernabéu, un campo donde Karim Benzema se encuentra muy cómodo cada vez que juega.
No cabe duda de que el francés está atrevesando un periodo de adaptación a Madrid muy complicado, de ahí que su rendimiento anotador no esté siendo tal y como se esperaba a su llegada. Sin embargo, sus estadísticas en el feudo merengue distantan de ser malas, pues de los nueve partidos que ha jugado en casa ha anotado en cuatro de ellos. Incluso en tres partidos ni siquiera partió como titular, así que no se le puede exigir mucho más al ex del Lyon.
El problema reside en que se ve a otro Karim cuando el equipo juega fuera de casa. El ariete acostumbra a desaparecer de los encuentros disputados como visitante y tan sólo ha perforado la portería rival en Milán, un campo, eso sí, de enjundia. Ni Sevilla, ni Barcelona, ni Pamplona, ni Bilbao... Benzema no ha podido inauguarar su casillero liguero a domicilio, en lo que es quizás un problema de carácter mental. A pesar de realizar buenas actuaciones como en Valencia o Bilbao el jugador no ha tenido suerte hasta el momento, pues incluso ante el Athletic mandó un disparo al palo.
Ante ello sólo queda que el jugador mantenga la tranquilidad y espere a que la suerte le llegue a domicilio. Mientras tanto, le espera el Málaga el domingo en el Santiago Bernabéu. Y en casa ya se sabe que Karim sí es el crack que le costó a Florentino 35 millones de euros, por lo que los malagueños harían bien en marcarle de cerca si no quieren que el francés siga incrementando sus cifras goleadoras.
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