El corte de luz se produjo justo cuando la megafonía anunciaba el regreso al terreno de juego de los dos conjuntos tras el descanso y ha provocado el enfado del público, para el que la vista del equipo blanco es un acontecimiento histórico.
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, quitó importancia al incidente y aseguró en declaraciones a Efe que esas cosas "pasan en todas partes". "Hoy es un día de fiesta para nosotros", dijo el máximo mandatario blanco.
El ministro de Industria, Prifti Dritan, explicó a Efe que el apagón se produjo por un fallo en dos fusibles de seguridad en la cabina de alta tensión del estadio Qemal Stafa, construido en los años 30 del pasado siglo.
Las repletas gradas han protestado con una fuerte pitada por el apagón, que ha interrumpido un partido considerado por la afición local como un momento histórico. La primera mitad del partido terminó con un empate a un gol.
Fotografía: realmadrid.com
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