En busca del fútbol de seda

Los de Pellegrini necesitan la victoria para seguir fuertes en su pelea con el Barcelona. No estará Cristiano pero el equipo no quiere excusas. Si Guti no empeora, el Madrid volverá a jugar con los 'tocones' en el medio.





A Pellegrini le acucian las dudas. Las molestias, los tocados o los casi recuperados focalizan tanto su atención que, por primera vez en la temporada, no dio la lista de convocados un viernes. Un síntoma de que no tiene clara la alineación.

De lo poco que quedó claro en el día de ayer fue que Cristiano cumplirá su penitencia. No hubo perdón para él. Era lo esperado tras el lío que se montó alrededor de su sanción. Una gran pérdida la del portugués, sin embargo, excusarse en su baja en un partido ante el Espanyol suena a chiste de Chiquito de la Calzada a las 5 de la mañana. No sirve. Pellegrini, al igual que el resto de departamentos del club, lo sabe y no dirá nada. Sin el luso se ganó en Valencia y Riazor aunque también se perdió en Sevilla y ante el Milán en el Bernabéu. Pero eso suena a guerra de guerrillas comparado con lo que debería ser el choque ante el Espanyol.

Ficha Técnica:

Real Madrid: Casillas, Lass o Arbeloa, Albiol, Ramos, Marcelo; Xabi Alonso, Granero, Guti, Kaká; Benzemá y Raúl o Higuaín.


Espanyol: Kameni; Iván Alexis, Pareja, Víctor Ruíz, David García; Javi Márquez, Baena, Verdú, Luís García, Coro; Osvaldo

Árbitro: Pérez Burrull (cántabro)

Estadio: Santiago Bernabéu (22.00 La Sexta)

Los catalanes se han presentado siempre como los ‘madridistas de Cataluña’. Sin embargo, pocas veces, por no decir ninguna, han regalado un triunfo en el Bernabéu y eso que hace muchos años que no ganan en Chamartín. Si la lógica se impone el Madrid debe firmar la undécima victoria en casa de la temporada aunque dicha cualidad y el fútbol suelen llevarse como el perro y el gato.

Retoques, sólo en caso de molestias

Volviendo a Pellegrini, parecería sencillo repetir un equipo similar al de Coruña, especialmente en el centro del campo. La creación de Riazor con tres jugadores de toque unidos por esa cosa redonda llamada balón sólo podría romperse por las molestias de Guti, no por invenciones de un ingeniero que está para hacer de todo menos para eso, para ingeniar cosas raras. Con Garay y Metzelder prácticamente fuera de combate, Lass tiene todos los números para ejercer de lateral derecho y centrar a Sergio Ramos.

A buen seguro que el Bernabéu está deseando ver una buena sinfonía de los suyos basada en el toque y la presión. El Espanyol tiene pinta de ser ese buen amigo que va dando bocados de su sandwich a todo aquel que se lo pide y que, al final, se queda sin merienda. Aunque de falsas apariencias está el mundo lleno. Precisamente eso, la misma apariencia de Riazor, es la que quiere y debe dar el Madrid en su feudo. Ya va tocando aquello de ganar, jugar y golear. No habría mejor triplete que ese.