"Voy a intentar hacerlo lo mejor posible como lo hago en todos los partidos, pero hay que reconocer que jugar en el Bernabéu siempre es algo diferente. De verdad que saldré a jugar a tope, pero como lo hago siempre. El momento de hablar de mi futuro llegará en verano, ahora estoy centrado en mi equipo. Para el Sevilla los tres puntos del sábado son muy importantes y lucharé por conseguirlos" respondió el pasado miércoles a la cuestión de cómo afronta el duelo ante los merengues.
De hecho, el jugador se debe ahora a su club, cuyos aficionados no quieren que salga de Sevilla. "La gente me lo dice: 'Jesús no te vayas'. Me lo piden. No sé lo que pasará, pero seguro que siempre pasa lo mejor para mi equipo, el Sevilla. Aún es pronto para hablar de nada del futuro, de lo que sucederá a a partir del 30 de junio" señaló al respecto. Una decisión en la que posiblemente influya mucho la presencia de su amigo Sergio Ramos en el Madrid, pues agregó sobre él que "somos amigos desde niños y tenemos una relación especial. La verdad es que no hemos hablado mucho del tema, pero siempre me está diciendo cosas buenas del Real Madrid y ahora me ha gastado varias bromas respecto al tema. Hay que ir despacio".
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