El regreso del hijo pródigo

Garay vuelve a Santander como un central consagrado en el Madrid





En ese tiempo, el hoy central madridista demostró estar preparado para jugar en un equipo grande. Con 18 años, y apenas 13 partidos de experiencia en la Primera División argentina, el Racing de Santander se hacía con los servicios de un prometedor central argentino que destacaba por su planta, una buena salida del balón y un potente golpeo de pelota. Con estas características no fue para nada extraño que se hiciera con un sitio en el once nada más aterrizar en la Liga española.

Fue titular indiscutible para todos los entrenadores que tuvo en el Racing (Nando Yosu, Miguel Ángel Portugal, Marcelino García Toral y Muñiz), convirtiéndose en uno de los zagueros más destacados de la Liga española no solo por sus excelentes condiciones para defender, sino también por ser un consumado especialista en los lanzamientos de penalti y de libres directos.

Fue entonces cuando el Madrid, por medio del propio Portugal (designado entonces secretario técnico del conjunto blanco) decidió hacerse con los servicios del argentino, aunque se quedó un año más cedido en Santander. Esa temporada no fue precisamente la mejor de Garay, pero aún así se incorporó a los entrenamientos del equipo en pretemporada, y con sus buenas actuaciones se ganó la confianza de Pellegrini, quien solicitó a la entidad que se quedara en la plantilla.

Y no podemos decir que la apuesta haya sido errónea, ni mucho menos. El argentino, tras lesionarse de gravedad Pepe, ha demostrado ser un central completamente apto para jugar en el Real Madrid, y ha despejado las dudas que muchos tenían sobre él en ese sentido. Así las cosas, Garay regresa este domingo a El Sardinero, estadio en el que empezó a dar sus primeras tardes de gloria en la Liga española, y en el que a buen seguro le recibirán con una sonada ovación en homenaje a los servicios prestados al Racing de Santander.