El holandés ha funcionado como acostumbra en las últimas fechas, sin embargo esta vez tuvo que lidiar con un contratiempo con el que no contaba. Y es que el '23' blanco sufrió una patada en la cara poco antes de llegar al descanso. El jugador madridista saltó con Diop a un balón dividido en el centro del campo con tan mala suerte que, al caer, la bota del jugador racinguista impactó en el rostro del madridista.
La herida empezó a sangrar de inmediato, de forma que Van der Vaart necesitó de la asistencia de los servicios médicos del Madrid. El jugador blanco tuvo que retirarse del terreno de juego y ni siquiera pudo reincorporarse antes de que Delgado Ferreiro pitara el fin de la primera parte porque la herida no terminaba de cerrarse. Afortunadamente para el madridismo, el futbolista pudo volver al terreno de juego tras el paso por los vestuarios.
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