Y es que los árbitros deben ser los encargados de impartir justicia, y eso Undiano Mallenco no ha sabido aplicarlo en el encuentro entre el Zaragoza y el Real Madrid. Su manera de señalar las faltas ha sido absolutamente dispar, y mientras a un equipo le ha dejado pegar todo lo que ha querido y más, el otro ha tenido que ver impotente como incluso dos de sus jugadores, Van der Vaart y Raúl, han tenido que retirarse lesionados debido a la dureza de los jugadores maños.
Ha sido en la primera parte cuando el colegiado navarro se ha mostrado más desafortunado. Y es que Eliseu y Contini (una máquina de matar este último, por cierto) debieron ser expulsados en la primera parte. El primero propinó un codazo en el estómago a Casillas, habiendo sido amonestado sólo con amarilla, y justo después propinó un pisotón cruel a Marcelo. Mientras que el segundo sacó a pasear el codo todo lo quiso y más. Su primera falta fue un codazo en la cara a Cristiano que tuvo que ser roja directa, pero que el bueno de Undiano no lo estimó así. Menos mal que el colegiado navarro pudo rectificar su error al soltar el brasileño nuevamente su codo, esta vez sobra la boca de Higuaín, y ahí si que vio la roja directa.
En las areas tampoco estuvo muy afortunado, ya que dejó sin señalizar dos claros penaltis a favor del equipo de Pellegrini. El primero fue cometido por Contini sobre Higuaín, al que puso la mano sobre el argentino el remate. Y el segundo fue cometido sobre Benzema, que fue zancadilleado por Jarosik cuando se disponía a rematar a portería.
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