Mourinho = títulos

El nuevo entrenador del Real Madrid ha tenido una exitosa carrera como entrenador.





Mourinho, una de las tres opciones preferidas del pasado verano (junto a Arsene Wenger y Carlo Ancelotti) para comenzar la segunda etapa del presidente prefirió entonces quedarse en el Inter, pero ahora llega como el gran deseado y como una necesidad imperiosa tras una nueva campaña aciaga. Pellegrini no ha cumplido con las expectativas y en el club no han querido darle más tiempo para el nuevo proyecto y la decisión ha sido fichar al campeón de Europa y, además, el verdugo del FC Barcelona en las semifinales de la máxima competición europea.

Mourinho se convirtió el sábado en el tercer miembro del selecto club de entrenadores que pueden presumir de haber ganado dos Ligas de Campeones con dos equipos diferentes, algo que hasta ahora sólo lo habían logrado el austriaco Ernst Happel y el alemán Ottmar Hitzfeld. Pero no sólo ese ha sido su aval, ya que muchos meses antes había sido ya el elegido para poder reflotar al club después de que la dos últimas temporadas haya sido inferior al Barcelona, que ha sumado siete títulos, por ninguno de los madridistas.

El luso supo frenar a los de Pep Guardiola en semifinales y, aunque su juego en el Camp Nou le valió numerosas críticas, por su apuesta conservadora, lo cierto es que la mayoría confía en que, con la pléyade de estrellas que tendrá en el Real Madrid, intentará devolver al equipo la excelencia. También se espera que, tras brillar en Oporto, Chelsea e Inter, pueda guiar al Real Madrid al primer plano de la escena europea, ya que el equipo blanco ha atravesado un calvario en las últimas campañas.

Y es que, tras vivir su última etapa dorada con tres títulos en los años pares de 1998 a 2002, desde 2004 no supera primer cruce, cuando eliminó al Bayern Múnich en los octavos para caer después sorprendentemente ante el Mónaco en cuartos. Además, en las últimas seis temporadas no ha sido capaz de superar ni siquiera una eliminatoria, con Juventus, Arsenal, Bayern, Roma, Liverpool y, por último, Lyon, como verdugos. Por ello, desde el club madridista se apuesta por un entrenador de éxito, de carácter y con ganas de mantener su línea ascendente y afrontar otro gran reto, como se ha cansado de asegurar en los últimos días e incluso semanas.


Él mismo ha sido su principal aval, aunque su trayectoria de los últimos años habla por sí sola, y teniendo en cuenta que sus primeros contactos con el fútbol español fueron mucho más modestos, ya que llegó al Barcelona en 1996 como ayudante e intérprete de Bobby Robson, con el que llevaba varios años trabajando en Sporting y Oporto. Sin embargo, se quedó cuando el británico se marchó al PSV Eindhoven y estuvo a las órdenes de Louis van Gaal, mejorando sus conocimientos y su trabajo como técnico hasta que en 2000 dejó el club azulgrana, que en ese tiempo había sido dos veces campeón de liga (1998 y 1999) y una de Copa (1998).

A partir de ahí, comenzó su carrera como primer entrenador y ya desde los comienzos dejó la impronta de su carácter. Su estreno fue en el Benfica, donde llegó en septiembre y estuvo sólo tres meses, ya que la nueva directiva entró en diciembre y no quiso ofrecerle un contrato a largo plazo. Así, estuvo un par de meses sin equipo, hasta que fichó por el Uniao Leiria, que fue su catapulta hacia él éxito, comenzando por el Oporto. Con 'Os Dragoes' ganó dos Ligas, una Copa de la UEFA, derrotando al Celtic de Glasgow (3-0) en la final celebrada en Sevilla, y una Liga de Campeones, en 2004, cuando pudo con el Mónaco.

Tras este éxito, el portugués dio el salto al Chelsea. Con los 'blues', ganó sus dos primeras ligas y se llevó además dos 'Carling Cup' y una 'FA Cup'. Sin embargo, su asignatura pendiente fue la Liga de Campeones, que no pudo ganar. Su primer intento acabó en semifinales ante el Liverpool. Un año después, en octavos de final el FC Barcelona ganó en Londres el único partido que Mourinho perdió en Stamford Bridge y acabó eliminado. En su última presencia en la Liga de Campeones como técnico del Chelsea, de 'Special One', como él mismo se denominó, volvió a caer eliminado ante el Liverpool de Rafa Benítez, ésta vez por penaltis.

Tras su paso por la 'Premier' decidió probar fortuna en la 'Serie A', donde llegó en 2008 para triunfar en el Inter de Milán. En su primera campaña conquistó nada más llegar la Supercopa de Italia y el 'Scudetto', pero este año todavía fue mejor, ya que se coronó con el 'triplete', aunque no seguirá en el club 'neroazzurri' para poder emular al FC Barcelona que en el temporada pasada sumó las históricas seis coronas. Con ese ambicioso objetivo llega al Real Madrid, sin dudas sobre su carácter, dedicación y categoría, pero con algunas sobre el juego, algo que, vista la nómina de entrenadores que han pasado por el banquillo blanco desde 2003, quizá esté en un segundo plano si se consiguen los títulos deseados.

Además, en la plantilla del Real Madrid contará con dos compatriotas: Cristiano Ronaldo, el nuevo líder del vestuario tras su exitosa campaña, y Pepe, que espera volver a ser el jefe de la defensa superada su grave lesión. Incluso es probable que aterrice con él Ángel Di María, nacido en Rosario, pero que conoce el fútbol portugués tras haber militado las tres últimas temporadas en el Benfica. Además, Maicon dejó caer que podría acompañarle desde el Inter.