Según se hace eco este miércoles el diario Marca, el centrocampista portugués del Oporto ha pasado a ser uno de los jugadores de atención de José Mourinho en este Mundial. Con 27 años, el futbolista es un fijo en los esquemas de la selección lusa que dirige Carlos Queiroz y ha dejado una gran impresión en la cita sudafricana, levantando el interés de los principales clubes europeos.
Al parecer, el nuevo entrenador del Madrid le considera un jugador muy versátil y con gran capacidad de sacrificio por el equipo. Además, entre sus características principales está la de robar bastantes balones por encuentro, un aspecto que Mourinho tiene muy en cuenta a la hora de seleccionar al candidato ideal para llevar la manija del conjunto blanco en el centro del campo. Además, el hecho de que termine contrato con el Oporto en sólo dos temporadas hace que el cojunto portugués no vea con malos ojos la opción de traspasarle a Madrid. Aunque para ello, Florentino tendría que poner algo más de 15 millones de euros sobre la mesa, un precio asequible hoy en día para las prestaciones que puede dar el jugador.
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