Con el cartel de transferible a cuestas

El futuro de Diarrá y Drenthe en el Madrid se complica tras la gira





No hay mayor ilusión para un jugador de fútbol que jugar en el Real Madrid. Y tampoco hay un trabajo más estresante que el de tener que demostrar día a día a tu técnico que eres válido para competir en él. Esta presión la están sufriendo estos días Mahamadou Diarrá y Royston Drenthe. Ambos no tienen ni mucho menos definida su continuidad en el equipo, que dependía en buena medida de la impresión que podía obtener Mourinho de ellos con los amistosos de pretemporada. Bien es cierto que vivir con la incertidumbre de no saber si el club cuenta contigo o no puede llevar a fallos de concentración durante los partidos, pero lo cierto es que ni el de Mali ni el holandés han estado especialmente afortunados en el 'stage' de Estados Unidos.

Diarrá sabe que con la llegada de Khedira se disputa con Lass ser el cuarto mediocentro del equipo, ya que Gago es considerado por Mourinho como intransferible. En los dos amistosos disputados en tierras americanas, el de Mali ha hecho pareja en el mediocentro con el francés, siendo el primero de ellos el que ha salido más perjudicado en la comparativa. Por todos es sabido que Diarrá no es un jugador capacitado para llevar el peso del juego, pero si además le unimos fallos de concentración, como el que tuvo en el segundo gol que endosó el América de México al Madrid en el primero de los amistosos, la situación puede ser calificada ya como preocupante.

Con Drenthe es el cuento de nunca acabar: si unimos sus ganas locas de triunfar con las pocas oportunidades que se le da para mostrar sus cualidades, da como resultado un jugador alocado que de lateral se despista mucho en la marca, y que en ataque no sorprende con sus incorporaciones. Su estado de ansiedad le llevó incluso a cometer un penalti ante el equipo de los Galaxy que puede ser calificado como imprudente y torpe a partes iguales.

En definitiva, mucho van a tener que cambiar las cosas para que estos dos jugadores convenzan a Mourinho de que pueden seguir en el equipo el próximo año. Tiene cuatro amistosos por delante para demostrárselo (Bayern de Munich, Standard de Lieja, Hércules y Peñarol), en los que pese a no haber nada en juego ellos tienen que dejarse la piel para convencer a su técnico.