Mourinho, mano de hierro en el vestuario

Según el diario Marca, el luso se ha negado a retrasar la hora de los entrenos





Al parecer, Iker Casillas se acercó hace unos días a Mourinho, como capitán del equipo que es, para hacerle llegar una petición que varios de sus compañeros le habían comentado. Ésta consistía en que ciertos jugadores querrían entrenar una hora más tarde de lo habitual para poder llevar a sus hijos al colegio, aunque el portugués no se mostró muy partidario del cambio, ya que, según el rotativo madrileño, la conversación se produjo en estos términos:

"Casillas: Míster, nos gustaría retrasar los entrenamientos una hora para que los padres puedan llevar a sus hijos al colegio.

Mourinho: ¿Usted tiene hijos?

Iker: No, pero hay compañeros que sí.


Mourinho: Pues entonces no se preocupe de la hora del entrenamiento.

(Silencio)

Mourinho: Además, son una minoría los que lo tienen"

De esta forma se daba por concluido un asunto que para Mourinho es prácticamente sagrado. Al entrenador le gusta tener todo bajo su control y seguir unas pautas muy estrictas de trabajo, por lo que la hora de entrenamiento es un aspecto prácticamente innegociable para él. Así que los jugadores con hijos en edad escolar deberán sacrificar la posibilidad de llevarlos al colegio por el bien de la plantilla.