Desde que diera comienzo la pretemporada, la relación entre Mourinho y Benzema ha sido como la de padre e hijo. El portugués está encima del ex del Lyon en todo momento, consciente de que en el Madrid no ha podido mostrar todo lo que se le presupone como jugador. Si alguna vez ha tenido que llamarle la atención delante de toda la plantilla, Mourinho no se ha cortado un pelo para hacerlo, como aquella vez en el que le dijo que, si por él fuera, los entrenamientos tendrían que empezar a las doce.
Y es que el técnico portugués está intentando inculcar a Benzema ese carácter ganador necesario no sólo para triunfar en el Madrid, sino para ser uno de los mejores delanteros del mundo. Le ha dejado claro en todo momento que, si tabaja bien en los entrenamientos, tendría su oportunidad más pronto que tarde. Y ese momento le ha llegado.
Será en su país natal, Francia, ante el conjunto revelación de la temporada pasada, el Auxerre. Será la segunda vez que el francés salga desde el inicio esta temporada después de ser titular en el partido de Liga ante Osasuna, en el que no estuvo especialmente afortunado. Un partido que se antoja fundamental para Benzema, ya que si además de hacer un buen partido consigue ver portería, ¿quién dice que no se puede asentar como titular en los próximos partidos?
DEJA TU COMENTARIO