Mourinho, tras los pasos de Capello

Desde hace cuatro temporadas el Madrid no presentaba un once con tres medios defensivos





Se trata de un sistema defensivo que no se ha visto en el Real Madrid desde hace cuatro temporadas. Por aquél entonces era Fabio Capello el entrenador del conjunto madridista, y tras una trayectorias en la Liga con más sombras que luces, el equipo tenía en la Champions su salvoconducto para arreglar una temporada que por aquél entonces se avecinaba decepcionante para los intereses merengues.

El rival en los octavos de la Champions en aquella ocasión fue el Bayern de Munich. Tras un partido de ida en el que, con el marcador final de 3-2, quedaba todo pendiente para el encuentro del Allianz Arena, Fabio Capello no tuvo mejor idea que introducir en Alemania, y  por primera vez esa temporada, un trivote defensivo formado por Mahamadou Diarrá, Emerson y Gago. Un entramado defensivo que para más inri se fue al traste a los 12 segundos del encuentro, momento en el que Makaay adelantaba al Bayern en la eliminatoria tras aprovecharse de un fallo defensivo de Roberto Carlos.

Tras ese error defensivo, Capello no fue capaz de rectificar en su planteamiento inicial hasta el minuto 30, momento en el que sacó del campo a Emerson para dar entrada a Guti. Sin embargo, esa reacción fue a la larga insuficiente para el equipo, ya que el Bayern, por medio de Lucio, conseguiría ponerse con una ventaja de 2-0, y el gol de Robinho en los instantes finales del encuentro no sirvió para remontar la eliminatoria, que se fue al traste en buena medida por el planteamiento ultradefensivo inicial del entrenador italiano. Menos mal que, tras un impresionante sprint final en Liga, el Madrid pudo ganar un título esa temporada.

El trivote Xabi - Lass - Khedira, patente de Mourinho

Ahora José Mourinho parece querer recuperar esa escuela. Y lo hizo el martes ante el Auxerre, un equipo sensiblemente inferior a los blancos, pero a los que hizo frente con tres centrocampistas de marcado carácter defensivo como son Xabi Alonso, Lass y Khedira. Con estos jugadores en el campo el Madrid logró tener más posesión del balón, pero no supuso ni mucho menos que el equipo rival creara menos peligro, ya que los franceses dispusieron de hasta tres ocasiones claras para haberse adelantado  en el marcador.

La lección que dio el partido ante el Auxerre es clara: si juegan los mejores es más fácil que se ganen los partidos. A la finalización de ese encuentro, muchos madridistas tuvieron la sensación de que, si hubieran estado Ozil y Di María desde el principio, no se tendría que haber esperado al minuto 80 para haber resuelto ese envite. Ahora falta por responder las dos preguntas del millón: ¿seguirá apostando Mourinho por este sistema?. Y la más importante: ¿tolerará la afición del Bernabéu que su equipo juegue más preocupado de que no le hagan goles a marcarlos ellos mismos? El domingo, a partir de las 21:00, tendremos las respuestas…