¡Al loro, que no estamos tan mal!

El Madrid recupera el gol ante un paupérrimo Deportivo de la Coruña





Este Madrid no va a pasar a la historia ni por su juego plástico y preciosista, pero sí por su efectividad. Ante un club que anda deseoso de ganar títulos, como ocurre en esta temporada, no crean que Mourinho va a intentar que este Real Madrid juegue un fútbol bonito, sino todo lo contrario: el fútbol de este Madrid va a ser práctico ante todo. Así lo demostró el equipo ante el Deportivo de la Coruña, un conjunto que ha atravesado tiempos mejores, y que esta noche ha sido un juguete en manos de los jugadores madridistas.

Los ánimos de la afición del Bernabéu estaban encendidos por el pinchazo del Barcelona ante el Mallorca. Ese estado de éxtasis parece que se transmitió del público a los jugadores al comienzo del encuentro, porque los chicos de Mourinho comenzaron el encuentro como motos. Tanto fue así que, en la primera llegada a portería, el Madrid se adelantó el marcador. Y el lapidado Cristiano Ronaldo, al que muchos le han mandado a los infiernos por dos o tres partidos, fue el encargado de anotar a su equipo. Su salto a lo Santillana dejó petrificados a los defensas coruñeses, que nada hicieron para evitar el tanto.

A partir de ahí, todo fue coser a cantar. Este Deportivo está muy lejos de ese que asaltó el Bernabéu en la final de la Copa del Rey del 2002, y como mucho va a aspirar a no bajar a Segunda. Y el Madrid, bien parapetado en defensa, y con Cristiano Ronaldo y Di María ejerciendo de Usain Bolt y Asafa Powell en sus respectivas bandas, aniquiló a los de Lotina como le gusta a Mourinho: a la contra. Los dos extremos blancos fueron auténticos puñales que desangraron hasta morir a la defensa del Deportivo, que fue una espectadora de lujo de la resurrección goleadora de este Real Madrid.

Todos querían apuntarse a la fiesta del gol: Sergio Ramos y Marcelo subían por las bandas, Higuaín mostró la voluntad de siempre… Pero finalmente vio portería el mago Özil. El alemán, un jugador muy intermitente, despertó del letargo para dejarnos la jugada del partido. Un quiebro por allí, una finta por allá, y estocada final con un disparo de zurda inapelable para Manu (min, 23). Partido sentenciado, y a esperar el tercero, porque con esta defensa del Deportivo no se podía esperar otra cosa.

Y ese tercer tanto llegó con la que sin duda fue la mejor jugada de la primera parte. Una contra fulgurante llevada por Özil en la banda izquierda, que puso el balón en el momento oportuno al fideo ‘Di María’ para que éste, de cabeza, dejará sentenciado el choque (min.33). No es que los de Mourinho hayan desplegado un fútbol de 18 kilates en la primera parte, pero las cuatro o cinco pinceladas de calidad fueron agradecidos por un público del Bernabéu que andaba deseoso de ver buen fútbol.

Tranquila segunda parte

FICHA TÉCNICA:

6 - Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Xabi Alonso, Khedira (Lass. Min.46); Di María (min. 77, Juan Carlos), Özil (min.68, Granero), Cristiano Ronaldo; e Higuaín

1 -Deportivo: Manu; Manuel Pablo, Lopo, Zé Castro (Aythami, min.66), Morel; Rubén Pérez, Antonio Tomás, Juan Rodríguez, Saúl (min.50), Guardado; y Lassad (Adrián, min.61)

Goles: 1-0: Cristiano Ronaldo (min.3); 2-0: Ozil (min.23); 3-0: Di María (min.33); 4-0: Higuaín (min.53); 5-0: Zé Castro (p.p. min.59); 5-1: Juan Rodríguez (min.78); 6-1: Cristiano Ronaldo (min.88)

Árbitro: Iturralde González, del Colegio Vasco. Amonestó  por el Deportivo de la Coruña a Lopo (min.3).

Incidencias: estadio Santiago Bernabéu. 70.000 espectadores. Lluvia y viento durante todo el encuentro.

Tras uno de los bocatas más satisfactorios que los madridistas han podido degustar en el tiempo de descanso, el inicio de la segunda parte fue por los mismos derroteros que la primera. Tras fallar Lassad un clamoroso mano a mano tras un fallo garrafal de Carvalho, los de Mourinho no perdieron el tiempo y se fueron a por la ‘manita’. La conexión argentina no tardó en aparecer de nuevo. Sergio Ramos, como si de Laudrup se tratara, dio un gran pase entre líneas a Di María, quien cedió a Higuaín, quien batió a Manu a placer. Con la defensa del Deportivo completamente desarbolada, Marcelo por un lado y Zé Castro por otro pusieron el quinto.

Con 30 minutos por delante el Madrid tocó sestear. Un justo premio para el mejor partido del Madrid en lo que llevamos de temporada. El gol de Juan Rodríguez, una mera anécdota. Y el sexto de Cristiano Ronaldo, una prueba más de que no se puede dudar del portugués. Pero no se confundan: marcarle seis goles al actual Deportivo de la Coruña apenas tiene mérito, y Mourinho tiene que preocuparse y mucho por que su equipo mejore su fútbol. El partido dejó, eso  sí dos buenas noticias: que el Madrid recuperó su instinto asesino en ataque y, lo más importante de todo, que el Madrid afronta este parón por las selecciones con dos puntos de ventaja sobre el Barcelona. Y es que, como diría aquél: ¡Al loro, que no estamos tan mal!