'Mou', un escalón por encima de 'Pelle'

El portugués ha sabido imponer su insaciable carácter ganador a los jugadores





El parón liguero de selecciones del mes de octubre es un buen momento para hacer balance de la mejora (o no) del equipo en las primeras semanas de competición. Y en el caso del Real Madrid de Mourinho éste no puede ser más favorable. Y es que el portugués no ha perdido aún un solo partido desde que es entrenador del equipo blanco (incluyendo también la pretemporada. Sólo con este dato le mete un gol por la escuadra a su antecesor, Manuel Pellegrini, quien a estas alturas ya llevaba acumulados en su haber dos traspiés de consideración. El primero fue en la pretemporada ante la Juventus, ante el que se perdió por un 1-2 en las semifinales de la Peace Cup. Y el segundo, ya en Liga, fue ante el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán, siendo el marcador final de 2-1 favorable para el conjunto entonces entrenado por Manolo Jiménez.

Y es que José Mourinho tiene como premisa principal que sus equipos se hagan fuertes en defensa. Para el portugués es fundamental que sus equipos reciban pocos goles, y no sólo lo ha conseguido en estos apenas tres meses que lleva trabajando en la capital de España, sino que el papel de Casillas en el equipo puede ser considerado incluso como intrascendente. En los ocho partidos oficiales que se llevan disputados entre Liga y Champions, los blancos han encajado nada más que dos goles (ante Real Sociedad y Deportivo de la Coruña), que además no supusieron en ninguno de los dos casos que el Madrid se dejara puntos en el camino, ya que ambos encuentros se saldaron con sendas victorias ante donostiarras y coruñeses.

Si algo ha podido empeorar el equipo respecto a la temporada pasada es en el tema de la eficacia de cara a portería. Y es que con Pellegrini en el banquillo el equipo logró sumar 25 goles (lo que supuso una media de más de tres goles por encuentro), mientras que con Mourinho sólo se llevan acumulados 14. Especialmente llamativos resultaron los empates cosechados a domicilio ante conjuntos sensiblemente inferiores a los blancos como el Mallorca y el Levante. Pero con la goleada ante el Deportivo de la Coruña (6-1) parece que los tiempos de goleadas y buen juego al Bernabéu están muy cerca de llegar. Porque Mourinho ha supuesto para el madridismo una dosis de ilusión que no se veía por este club desde los tiempos de Vicente del Bosque. Y es que, al igual que el salmantino, el técnico portugués está destinado a hacer historia en el Real Madrid.