Y lo ha hecho además de tres maneras distintas. La primera de ellas ha sido marcando él mismo los goles, una circunstancia que se ha repetido hasta en cuatro ocasiones. Di María ha marcado tres goles en Liga (ante Real Sociedad, Deportivo de la Coruña y Hércules) y otro más en Champions (ante el Auxerre). Se da la casualidad además de que, siempre que marca el ‘Fideo’ el Madrid se lleva la victoria. Así ocurrió en esos cuatro partidos en los que el ex del Benfica vio portería, y también en los dos amistosos de pretemporada en los tuvo la fortuna de marcar (ante el Hércules y el Peñarol).
Di María llegó al Real Madrid con la vitola de ser uno de los mejores asistentes de Europa, eso es algo que también está demostrando en el conjunto blanco. Con Higuaín ha formado una sociedad casi perfecta, y ha sido el ‘Pipita’ el principal beneficiado de los buenos pases de gol del extremo madridista. El extremo es, con siete asistencias, el mejor de los de Mourinho en ese apartado del juego, y esos pases que acabaron en gol se los ha repartido de la siguiente forma: dos asistencias ante el Racing de Santander y una ante el Deportivo, Athletic, Murcia, Milan y Atlético de Madrid.
Por si estos datos a algunos les resultara insuficientes, Di María ha sido capaz de provocar un total de tres penaltis (ante Racing, Athletic y Murcia), los cuales fueron aprovechados además por sus compañeros. En total son catorce los goles en los que el internacional argentino ha tenido una participación trascendental para su equipo. Al ex del Benfica no le ha hecho falta periodos de adaptación de ningún tipo, y en tan solo tres meses ha conseguido hacer olvidar la figura de Robben, el último gran extremo del Real Madrid.
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