Dios creó un balón para ver esto

Mourinho pondrá su once de gala. Cristiano, con muchas ganas de marcarle al Barcelona.





Llegó el gran día que todos los aficionados en España, Europa y el Mundo esperaban como si de pequeños niños se tratara antes de la noche de Reyes. Y es que este Barcelona-Real Madrid es un regalo para la vista de todo aquel que tenga en el fútbol una de sus pasiones. Será un duelo de individualidades inmiscuidas en un equipo. De dicha premisa no se salva nadie.

FICHA TÉCNICA.

FC BARCELONA: Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Abidal; Busquets, Xavi, Iniesta; Pedro, Messi y Villa.

REAL MADRID: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Xabi Alonso, Khedira; Di María, Ozïl, Cristiano Ronaldo; e Higuaín.


ÁRBITRO: Iturralde González (C.Vasco).

ESTADIO: Camp Nou.

HORA: 21.00/GolT y C Liga.

Sobre el césped se juntan los mejores jugadores del mundo de todas las nacionalidades del globo. Los españoles, por descontado, pero también habrá argentinos, brasileños, portugueses, franceses o africanos. La mejor forma de exportar el fútbol español, sin duda. Además, la pimienta se instala en el partido gracias a Mourinho, ese personaje que desata miedo y odio a partes iguales. Al luso sólo le faltaba pisar uno de los estadios que más le odia, el Camp Nou, bajo el escudo del eterno rival culé, el Real Madrid. El guión sería de Hollywood.

El partido supondrá, además, un choque de estilos. El del toque del Barcelona frente al directo del Madrid. Posesiones inagotables gracias a los Xavi e Iniesta frente a la picadura letal gracias a la velocidad de Di María o Cristiano. En el centro del campo puede estar la gran diferencia. En los últimos clásicos ha sido el Barcelona el que ha dominado el tempo del choque, mientras el Madrid sólo corría de lado a lado. Mourinho tendrá en su cabeza que la pelota, en condiciones normales, debe ser local. Sin embargo, al contragolpe su equipo es letal. Ese será su gran arma: velocidad, verticalidad y, sobre todo, acierto. Ahí debe aparecer la figura de Cristiano Ronaldo, que ya el año pasado tuvo la opción de abrir el marcador en Barcelona y falló. Un fallo que, a buen seguro tendrá muy presente para no volver a repetirlo, y de esta forma quitarse de encima ese gafe que le acompaña ante la camiseta azulgrana. Luces, cámara y acción ¡Que empiece ya!