El entrenador luso del conjunto de Concha Espina discrepa con Jorge Valdano en infinidad de cuestiones deportivas. El supuesto enfrentamiento avivado por la prensa pondría en jaque a Florentino si tuviese que decantarse o bien por su mano derecha o bien por el técnico al que apostó su última jugada.
El domingo en el Santiago Bernabeu pudimos ver pancartas de apoyo al entrenador blanco demostrando que la afición le aprecia y confía en su buena gestión de la plantila.
Su galardón en la entrega de premios del Balón de Oro FIFA le certifica como el mejor técnico del plantea.
Mou ya triunfó allá donde estuvo (Oporto, Chelsea, Inter), lo que da razones para creer que aquí también lo hará. Lo mismo pasó con Ettore Mesina, técnico de la sección de baloncesto de la entidad blanca. Sin embargo parece ser que ambos no gozan de la plena confianza de la directiva.
La última década madridista podría definirse como un auténtico desfile de técnicos para ocupar el banquillo blanco, todo un menú degustación de diferentes perfiles técnicos y por lo visto, ninguno del agrado de los mandatarios.
Ahora tenemos a los mejores en sus respectivos campos. Mesina y Mourinho, indiscutibles para la mayoría de la afición, pero como todo técnico merengue, siempre en el punto de mira de los de arriba.
Si triunfaron en equipos con plantillas mucho más limitadas que las que tiene ahora mismo el Real Madrid, ¿por qué no van a hacerlo aquí?
¿Cuál es ese aciago factor común que evita que los técnicos triunfen en el banquillo del Bernabeu? ¿Por qué nadie aguanta más de una temporada al frente del equipo de fútbol?
El dato más relevante quizás es que ningún entrenador fichado por el actual mandatario blanco, Florentino Pérez, ha ganado nunca un título, salvo la supercopa que Vicente del Bosque le sirvió en bandeja a Queiroz antes de que le echasen sin razón alguna.
¿Qué merma el rendimiento de tantos ases de los banquillos? Falta de tiempo, de confianza, presión mediatica… ¿o puede que la directiva del club?
DEJA TU COMENTARIO