La Liga se escapa

El Madrid se jugaba la Liga esta tarde en Pamplona. José Mourinho no podía contar de inicio con Xabi Alonso, que está atravesando un proceso gripal, y se la jugaba sin ningún otro cambio en el once tipo. Osasuna no se podía permitir la derrota, después de 8 partidos sin ganar, y el Reyno de Navarra se  volvía a llenar para presionar al Real Madrid.

Los primeros minutos fueron, como siempre en Pamplona, intensísimos y muy peleados.  Las llegadas a portería escaseaban, pero ambos equipos ya empezaban a dar muestras de peligro. Coro avisaba con un disparo lejano y Benzema estuvo a punto de conectar un cabezazo que hubiese supuesto el primero, pero al francés se le escapó por poco.

El partido estaba enganchado y Osasuna no paraba de hacer faltas. Cristiano no podía entrar en juego sin que le dieran un palo. El Madrid no podía dar tres toques seguidos sin sufrir una falta, pero Muñiz no quería sacar tarjetas por reiteración.  El Madrid avisaba con un buen remate de Benzema a un centro de Özil, que se marcó un jugadón de 70 metros con caño incluido.

Pasada la media hora de partido, Pandiani la tuvo para Osasuna, pero Benzema volvía a responder con un gran disparo con la zurda. Sólo una excelente intervención de Ricardo evitó el gol madridista.

Al filo del descanso, el Madrid empezaba a coger el control. Özil hacia lo que quería, nadie era capaz de quitársela y eso hacía crecer al Madrid, pero todavía no dominaba claramente. Cristiano volvía a estrellarse con Ricardo en un disparo algo escorado, después de un buen pase en profundidad de Di María.  Llegábamos al descanso con un ambiente que no podía ser más tenso.

La segunda parte empezaba con la misma tónica. Mou mandaba a calentar a Kaka’, Xabi Alonso y Adebayor porque el partido necesitaba un cambio de tendencia. Cristiano volvía a poner el susto en el cuerpo a los rojillos, pero su disparo cruzado iba a salir por muy poco.

Sin embargo, Camuñas iba a ser el que marcará el primer gol del partido. El disparo cruzado del jugador de Osasuna tocaba el palo y entraba, sin que Iker pudiese hacer nada para evitarlo. Inmediatamente, Mou reaccionaba con un triple cambio y metía a Adebayor, Kaka’ y Xabi Alonso, para jugársela con 3 defensas en lo que quedaba de partido.

Al Madrid no le quedaba otra que apretar hasta el final. Özil lanzaba un libre directo que iba a salir cerca de la escuadra e Ricardo. El Madrid apretaba y Osasuna seguía cortando el juego. Benzema la volvía a tener con un cabezazo, pero otra vez se iba por arriba. Tampoco tenía suerte el Madrid.

Faltaba cuarto de hora de partido y el Madrid embotellaba a Osasuna, que no tenía intención de salir de su área. De esta forma, iba a ser Osasuna el que iba a acercarse más al gol. Vadócz tiraba con Iker fuera del arco y Arbeloa la sacaba en la línea.

A partir de ahí, Osasuna durmió el partido. El Real Madrid no creaba peligro y el partido se acababa. El Madrid se dejaba media Liga en Pamplona.