La Asamblea de la LFP acordó semanas atrás este paro patronal en la jornada del próximo fin de semana con el objetivo de conseguir que se anule la obligatoriedad de transmitir un partido en abierto todas las jornadas y que se cambie la Ley del Juego, y los clubes reciban mayores beneficios por las apuestas y de la Quiniela.
Sin embargo, Athletic, Espanyol, Real Sociedad, Real Zaragoza, Sevilla y Villarreal se oponen a esta decisión y presentaron una demanda para que se anule este acuerdo, solicitando medidas cautelares antes de que se adopte una decisión definitiva dada la premura temporal. La juez pidió escuchar los argumentos de las partes, por lo que los representantes legales de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y del 'G-6' estaban citados este martes (10.00 horas), donde comparecieron durante unos 45 minutos. Un problema "de voluntad" Durante su exposición, el abogado de la Liga, Miguel García Caba, recalcó que "huelgas ha habido muchas y que el calendario siempre se ha acabado" por lo que cree que "esto es un problema de voluntad". Además, aseguró que cuando se celebraron reuniones a este respecto el 3 y 11 de febrero se aprobó esta decisión por mayoría de convocar un paro, al que sólo se oponen seis clubes de los 42 que componen las dos máximas categorías. Mientras, Juan de Dios Crespo, abogado del Sevilla y que representa a los clubes 'disidentes', afirmó que "ni en España ni en ningún país se puede obligar a los afiliados a que acepten algo con lo que no están de acuerdo". Incluso subrayó que el calendario está hecho desde el pasado verano y que la LFP no tiene competencia para modificarlo. Tras esta vista, la juez deberá tomar una decisión al respecto, que se hará pública el miércoles (sobre las 10.00 horas) y que confirmará si finalmente se disputa la jornada liguera de este fin de semana.
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