Rosell compareció ante la prensa junto con Florentino Pérez y enseguida salió a colación su pronóstico de goleada en la campaña 'Mandemos el hambre a la porra', cuando adelantó que el Barcelona iba a gana 5-0 esta noche "para no perder la costumbre". "Me equivoqué en el pronóstico pero estoy muy contento porque dijimos que conseguiríamos 200.000 kilos de comidas y hemos conseguido 200.001", ironizó Rosell. "No se entendió la porra, se sacó de contexto. A veces el que critica no entiende que hay gente que lo pasa mal y que necesita comida", aclaró.
Respecto al maratón de clásicos que se avecina, el presidente azulgrana explicó que "las sensaciones son muy buenas" porque en el club azulgrana ya han "hecho los deberes", que pasaban por "llegar a este momento de la temporada con opciones de ganar títulos". "Queremos poner la guinda en el pastel. Las sensaciones son fantásticas, estamos muy contentos de estar aquí para jugar contra el Real Madrid estos clásicos que a tantísima gente le gusta ver y a nosotros jugar", declaró.
Tras aclarar que "la relación institucional es óptima" entre los dos clubes y que mantiene una "amistad sin lugar a dudas" con Florentino Pérez, Rosell reconoció que el resultado de este primer duelo entre ambos equipos afectará de cara a los siguientes, aunque no sabe si "de forma positiva o negativa".
Por último, el mandatario catalán pidió deportividad entre las hinchadas durante este mes de abril. "No veo tensión en el ambiente, pero por si alguien la ve hago un llamamiento para que las dos aficiones se lo tomen como un juego. Cada una debe animar desde el respeto al contrario, sin agresividad ni violencia", reclamó un Rosell que tiene claro qué clásico prefiere ganar: "Siempre el próximo".
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