"La vergüenza que pasé jamás la sentí en un banquillo"

El entrenador del Valencia, Unai Emery, acabó muy enfadado y fue muy crítico con los suyos.





"Hemos hecho el ridículo. El pasillo de honor al Real Madrid ha durado hasta el minuto 60. No hemos estado con la agresividad, exigencia, intensidad necesaria para poder ganar el partido. Era nuestra oportunidad, y lo hemos estropeado, y ahora estamos ocupados y preocupados por saber los motivos por los que ha sucedido esto", ha indicado.

"Ahora lo que más deseo es esconderme tres días, pero mi responsabilidad es empezar la semana para afrontar el partido de Pamplona, donde nos van morder antes durante y después del partido", ha añadido Emery, quien ha asegurado que "la vergüenza que he sentido en el banquillo no la he pasado nunca".

En su dura crítica por el pobre partido de su equipo Emery ha añadido que: "ahora mismo estoy perdiendo vida por esta derrota y el presidente también, ya que nuestra obligación no es ganar siempre, pero si mostrar casta y orgullo. Con partidos como este se nos escapa el tercer puesto e incluso perderemos el cuarto puesto y para el Valencia es muy importante a todo los niveles, tanto deportivo como social y económico. No podemos dejar de estar en la Liga de Campeones", ha continuado.

"Llevamos tres o cuatro descalabros en la temporada que Unai Emeri no está dispuesto a consentir y repetir. Estoy indignado como entrenador de mis errores y por los del equipo. No se puede permitir plantear un partido con una defensa seria y seamos un coladero", ha proseguido.


En su tono crítico, Emery ha apostillado que: "Hoy hemos sido un desastre. El año pasado perdimos 2-3 pero hicimos un gran partido. Hoy este equipo parecía el decimoquinto de la Liga". Respecto al destinatario de sus críticas ha indicado: "la crítica me la hago yo. El mismo equipo que gana 5-0 pierde hoy 3-6 y no lo entiendo, ya que ante tu afición es mucho más vergonzoso. La agresividad que empleamos ante el Villarreal hoy no la hemos tenido. Nos ha faltado carácter".

Emery, que ha pedido perdón a la afición por "este examen que hemos suspendido", ha indicado que ha querido tener paciencia para hacer los cambios ante el descalabro que vivía el equipo en el campo pero ha reconocido que "quizá" ha debido hacerlos antes.