En una reunión de urgencia en el Camp Nou, el club barcelonista acaba de decidir que presentará esta denuncia porque entiende que las declaraciones de Mourinho contravienen el artículo 5, apartados B y D, de las normas de la UEFA, relativas a "lesionar la reputación del fútbol".
Así lo ha confirmado esta tarde el secretario de la junta azulgrana, Toni Freixa, quien ha asegurado que el Barça se siente "perjudicado" por las declaraciones del técnico madridista y que por ello "defiende su historia, prestigio y honorabilidad por el esfuerzo que hizo el club por ganar la Liga de Campeones del 2009. Es inaceptable que nadie se atreva a cuestionar nuestros títulos ni tampoco nuestra relación con UNICEF. No queremos avivar el fuego, sino apagarlo. Los líderes sociales sólo tendrían que hablar de fútbol y no de cosas que incitan a la violencia", ha añadido.
Freixa aseguró que el club trabaja "como una piña", por lo que el cuerpo técnico está de acuerdo con la denuncia que ha propuesto la Junta Directiva a propuesta del presidente, Sandro Rosell, nada más conocer el resultado de la comparecencia de prensa del técnico luso: "Comparecemos ahora porque se han producido unos hechos que sobrepasan ciertos límites. Antes no era tan necesario como ahora, como se ha visto con la respuesta unánime del mundo del fútbol y de la UEFA. Nuestra actuación ha ido en consonancia con la de la UEFA", recordó. Eso sí, no rechazó acudir a la vía judicial si la resolución del organismo europeo no les parece la adecuada.
Por último, aseguró que no se imagina en ningún caso y que ve "imposible" que algún día un entrenador del FC Barcelona pueda manifestarse como lo hizo José Mourinho.
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