Mourinho tiró de sus suplentes de lujo para este partido. Así las cosas, el tridente ofensivo estuvo compuesto por aquellos que le sacaron los colores al Valencia hace algunos días en Mestalla, es decir, Kaká, Higuaín y Benzema. Los tres estuvieron flanqueados en el medio por dos jugadores creativos como Canales y Granero que, a su vez, tuvieron en Pepe a ese escudero guardaespaldas que ya parece haberse afianzado de mediocentro no sólo en los partidos ante el Barcelona.
La baja de Ramos para el partido del próximo martes por sanción propició su titularidad como lateral derecho. Carvalho, Garay y el canterano Nacho completaron la línea de cuatro por delante del auténtico indiscutible de este equipo, el cancerbero Iker Casillas.
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