Hacía semanas que venía esperándose que el club hiciera oficial lo que era un secreto a voces. El anuncio estaba previsto para la vuelta de vacaciones, pero parece ser que no hubo mucha coordinación entre el Departamento de Comunicación del club y el futbolista, que cuestionado por su renovación no dudó en afirmar que no estaba completamente cerrada. ¿Tal vez porque ni tan siquiera se enteró del anuncio del club?
No se sabe si fue una cuestión horaria (hay 9 horas de diferencia con Los Ángeles), el jet lag o un simple lapsus verbal, pero lo que está claro es que las declaraciones de Ramos sonaron a chiste después de que el club hubiera emitido ya el comunicado oficial sobre su renovación. En cualquier caso, no es la primera vez que a Sergio le ocurre algo similar, muy dado a meter la pata (verbalmente) a la hora de hablar con los medios.
Ahora se nos plantea la duda de si realmente fue un error de Sergio al expresarse, falta de comunicación o de coordinación con el club, o si éste se adelantó a la hora de anunciar una renovación que estaba cerrada desde hacía semanas. Sea como sea, lo que parece evidente es que Ramos seguirá vistiendo de blanco hasta 2017. Eso es, sin duda, lo fundamental.
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